Los seguros de vivienda brindan una protección indispensable a aquellas personas que son propietarias de un inmueble, así como a la propiedad misma.
Se pueden obtener tanto de empresas públicas como de empresas privadas, y dependiendo de las condiciones bajo las que desees contratar un seguro de hogar, este te brindará distintos tipos de protección dependiendo de la póliza que elijas y la cobertura de sus daños.
Contratar un seguro de hogar es indispensable para mantener tu patrimonio seguro de asuntos fuera de tu control. Te brinda la seguridad que tu esfuerzo y trabajo, incluidas las pertenencias que se encuentran dentro de él, ya que la mayoría de los seguros de casas cubren igualmente los bienes perdidos dentro de un inmueble en caso de accidentes o incendios.
Algunos de los accidentes que los seguros de casa cubren son:
Si en tu hogar ocurrió alguna de las situaciones anteriormente enlistadas, puedes hacer válida la póliza de tu seguro de casa presentando documentos y evidencias que muestren tus pérdidas y hacer valer tu derecho a recibir un porcentaje del dinero o la reparación total de las partes afectadas en el inmueble. Los seguros de casa funcionan de la siguiente manera.
Cómo funciona un seguro de casa y cómo hacerlo válido:
Conoce la cobertura de tu seguro de casa
Conocer a fondo la cobertura de la póliza de tu seguro te ayudará a estar preparado en caso de que ocurra algún accidente.
Es común que, al adquirir una nueva casa, los seguros de vivienda ya vengan contratados e incluidos en el pago de la hipoteca, haciéndolos obligatorios para muchas personas. Esto es debido a que, por ley, al comprar un inmueble, las constructoras e instituciones de créditos hipotecarios tienen el deber de brindarte una propiedad en óptimas condiciones.
Sin embargo, la póliza de este seguro de casa estándar, muchas veces se limita a cubrir solo percances menores que no afecten la estructura principal del inmueble u otro tipo de gastos mayores, y cuyas compensaciones no representan un gasto fuerte para las aseguradoras.
Debido a esto, tú como beneficiario, deberás asegurarte de contar con la mayor protección posible al contratar un seguro de casa, teniendo en mente que esto será más bien una inversión que un gasto.
Presenta la evidencia de todos los daños ocurridos
Tras ocurrir un accidente, recopila toda la evidencia necesaria para presentarla ante un ajustador de seguros y la compañía que provee el servicio.
Será mejor que no intentes mover o acomodar tus pertenencias o escombros dentro del inmueble después del incidente, ya que esto podía poner en peligro el veredicto final del ajustador y reducir el monto de dinero que podrías recibir para recuperar tus pérdidas.
Si intentas cambiar algo de la escena del accidente, la aseguradora podría pensar que tú mismo estás provocando más daños y negarse a compensar todos los bienes afectados.
Toma fotografías de todos los espacios dentro de tu hogar, entrevista a testigos, o, en caso de un asalto traumático, asegúrate de contar con apoyo psicológico que, además de ayudarte, podría probar tus daños y funcionar como un justificante para recibir apoyo de parte del seguro de casa que contrataste.
Recopila las facturas de los bienes dañados
Mantener un archivo ordenado de las garantías y facturas de todos tus bienes también te ayudará a reclamar una compensación de parte de tu seguro de casa. Este tipo de evidencias probarán que tus bienes personales fueron dañados y, dependiendo de tu póliza, podrían ser sustituidos o reembolsados.
Cuando sea el momento, un ajustador de seguros asistirá a realizar una investigación y entrevistas a todos los involucrados en el incidente, y será ahí en donde podrás presentar estas facturas y las demás evidencias para ayudar a tu caso.
Proceso de conciliación
En caso de que la cantidad de compensación propuesta por el ajustador de seguros no sea suficiente para cubrir tus pérdidas, o no la consideres justa, podrás apelar este monto y comenzar un proceso de conciliación, en donde se realizará otra investigación y, junto con la compañía de seguros de casa, se tratará de llegar a un acuerdo que beneficie a todas las partes involucradas.
Toma en cuenta que este proceso podría ser un poco largo y necesitar más documentación dependiendo de las condiciones de tu seguro de casa, sin embargo, en casos de situaciones inesperadas y peligrosas para tu familia, contar con esta protección te ahorrará estrés y tiempo valioso que puedes utilizar para sanar tus posibles heridas emocionales y seguir trabajando para reconstruir tu patrimonio.