El paso más importante al comprar una casa es llevar a cabo el trámite de la escrituración. Es la única forma en que tendrás la certeza de que eres el dueño, además de evitar posibles fraudes.
Los notarios son la autoridad facultada para la entrega de escrituras. Podrás elegir con quién trabajar comparando precios por honorarios, la ubicación de sus oficinas respecto a tu lugar de trabajo o del inmueble a comprar, o simplemente decidirse por aquella que te brinde el mejor trato.
Puedes consultar el directorio oficial de notarías de la República Mexicana a través del Colegio Nacional del Notariado Mexicano.
El colegio organiza jornadas notariales para otorgar reducciones en impuestos, derechos y honorarios. Con descuentos del diez hasta el 60% en trámites inmobiliarios, en proporción al valor catastral de la propiedad.
¿Qué hace un notario?
El notario revisa la documentación de la casa y solicita el certificado de libertad de gravamen y certificaciones correspondientes de no adeudo de predio, agua, mejoras, clave y valor catastral, además de requerir documentos generales tanto del vendedor y del comprador para iniciar el trámite.
Una vez firmadas las escrituras, ya sea que pagues de contado o con un crédito hipotecario, el notario inscribe el testimonio en el Registro Público de la Propiedad. En el momento que el inmueble quede inscrito concluye el proceso de escrituración y el notario te avisará para que recojas tu documento en original.
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